martes, 19 de mayo de 2009

Querido Benedetti:

Ayer por la mañana me enteré de que al fin te habías ido.

Me lo dijo Cristina, con la que juego a que somos 4 y que por eso nos pasan cosas especiales de las que otra gente no se da ni cuenta. Pero ayer lo especial eras tú, porque precisamente ella la noche anterior le había pedido a su creo que marido que le buscara unos poemas tuyos, ya que a mí últimamente me tenías revuelta y hablábamos de ti. Y entonces, llega la mañana siguiente y resulta que el periódico dice te mueres, y que otra vez la vida (o la muerte en este caso) parece toda conectada.

Lauritrón se acababa de ir a tu tierra. Es más, creo que hasta en tu última semana habíais compartido la misma calle en Montevideo...Al marcharse ella de Madrid nos despedimos a la uruguaya, regalándonos mutuamente por casualidad, aunque quizá previsiblemente, unos libros tuyos: "La vidad adrede" para ella y "Testigo de uno mismo" para mí.

En fin, de pronto estuviste en todo otra vez. Como siempre, llegabas de nuevo con tus palabras a colocar mis emociones. Con tu sencillez volvías a decir en fácil lo que ni siquiera sabía donde estaba... e incluso lograste remover las emociones de uno mis alumnos más rebuscados en tu poema lleno de "dudas".

Estaba tan a gusto con el reencuentro...y te hice un repaso que comenzaba cuando te descubrí en ese libro peregreino de "despistes y franquezas" que Juan me regaló hace muchos años y que ya ha tenido que pasar bajo muchos ojos, que seguía por el "sexo de los ángeles" que nos encantó en Lovaina, continuba hacia el "corazón coraza" en el que me encerraba con Alba cada vez que una historia de esas no nos fluía o no la dejábamos correr y te bifurcabas finalmente por todos esos caminos abiertos que me dejaste en "Inventario" cuando en el 2006 estuve triste aunque no quería y me lo pusiste más fácil.

Ahora has vuelto y de pronto dicen que te has ido, pero Lau está allí y hace unos cuantos días que ha empezado a escribir sobre tus paredes...Lo siento, pero creo que ya nunca vas a poder salir.